El uso de las aplicaciones móviles crece cada año y cada vez es más natural realizar operaciones cotidianas desde el smartphone. Aprovechando esta comodidad que ofrecen, también es cada vez más habitual que los negocios lancen sus propias aplicaciones para mejorar sus servicios o para llegar a un público más amplio. Pero la gran variedad de dispositivos actual y la heterogeneidad del software que presentan es un problema para el desarrollo de estas aplicaciones.
Las aplicaciones nativas de iOS o Android son aquellas que se programan específicamente para un sistema operativo y precisan de conocimiento en los lenguajes propios de cada una para desarrollarse. Por lo tanto, si una empresa quiere tener presencia en los dos entornos tendrá que realizar dos desarrollos diferentes para lanzar sus apps.
Las aplicaciones híbridas ponen solución a este problema combinando elementos de aplicaciones web con elementos de aplicaciones nativas. Utilizan código HTML y Javascript que se ejecuta dentro de un contenedor, con ayuda del motor del navegador web del dispositivo y hacen uso de las interfaces disponibles para acceder a utilidades nativas como la cámara, el GPS o el giroscópio. De esta manera, se puede escribir código para una sola aplicación móvil que se adapta a múltiples plataformas y se agiliza (y por tanto, se abarata) el desarrollo de aplicaciones que pueden ser desplegadas tanto en Android como en iOS, por ejemplo.
De esta ventaja en el desarrollo podemos derivar otras:
- El mantenimiento y las actualizaciones de las aplicaciones son más fácil de abordar.
- Al desplegar la aplicación en diferentes sistemas operativos, permiten llegar a un público más amplio y a un mayor abanico de clientes.
Sin embargo, merece la pena mencionar la principal desventaja de las aplicaciones híbridas ante las nativas, y es que no se aprovechan igual de bien las capacidades del hardware del dispositivo, de manera que, las aplicaciones más exigentes se podrían ejecutar más lento. Aún así, la potencia de los dispositivos de hoy en día relaja esta diferencia haciéndola casi imperceptible en la mayoría de los casos.
Frameworks de desarrollo de aplicaciones híbridas
Ionic
Es uno de los frameworks más conocidos, ofrece una gran librería de componentes para personalizar interfaces con facilidad y una documentación amplia y clara. Además, se puede complementar con otros frameworks de javascript como React o Angular.
React Native
Gracias a la confianza que han depositado empresas como Facebook, Skype e Instagram, React Native se ha convertido en otro de los frameworks de desarrollo de aplicaciones nativas más conocidos. Cuenta también con una gran comunidad para consultar y solventar los problemas que se puedan encontrar durante el desarrollo.
Flutter
Este framework desarrollado por el gigante tecnológico de Google es uno de los proyectos de desarrollo de aplicaciones que más está creciendo del mundo. Utiliza el lenguaje de Dart para otorgar un gran rendimiento a las aplicaciones desarrollados con él.
jQuery Mobile
Es un framework con una curva de aprendizaje baja desarrollado y mantenido por el equipo de proyectos de jQuery desde 2010.
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