El puesto de trabajo en el Cloud: Azure Windows Virtual Desktop

El teletrabajo se ha convertido en la herramienta fundamental como contingencia para la actual situación sanitaria y, nos guste más o menos, ha llegado para quedarse. Según Gartner, el 74% de las empresas consultadas han planteado dejar de forma permanente un porcentaje de su plantilla en teletrabajo.

Esta situación nos fuerza a buscar herramientas que faciliten y permitan movilidad en los puestos, sin perder funcionalidad y, sobre todo, seguridad en el acceso a los sistemas y los datos de nuestras compañías.

Modernizar el puesto de trabajo para trabajar como se quiera y donde se quiera

Las herramientas con las que podemos contar van desde:

Esta última herramienta es muy interesante al permitir, por un lado, un mayor grado de satisfacción del usuario con la tecnología al elegir la configuración de su equipo (el empleado siempre considera que su dispositivo corporativo es peor que el personal). Por otro lado, una mayor durabilidad pues el usuario cuidará mejor un equipo en propiedad. Además del ahorro de costes para la empresa en el mantenimiento y compra de dispositivos.

En cualquier caso, sea un equipo adquirido en modalidad BYOD o sea un equipo propiedad de la compañía, hay que garantizar la integración con las aplicaciones de la compañía, sus normativas de seguridad, etc.

Windows Virtual Desktop

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El servicio de Windows Virtual Desktop de Azure reduce la complejidad del entorno a implementar. Nos permite desplegar de una manera sencilla tanto “PCs” virtuales con Windows 10 como sesiones de escritorio de Windows Server, con la configuración de aplicaciones y acceso requeridas por nuestro negocio. Podremos ejecutar desde cualquier sitio nuestras aplicaciones corporativas, desde cualquier dispositivo, facilitando la adopción de BYOD. La información queda encapsulada fuera del entorno del usuario y los accesos son controlados y cifrados, bien a través de túneles o sesiones HTTPS.

La solución nos permite:

Pongamos un ejemplo de aplicación

Supongamos una compañía con una estructura de sistemas de información típica. Con un conjunto de servidores instalados en un centro de datos propio (ERP, Servicio de Ficheros, Directorio Activo, Correo electrónico, etc). En situación normal la compañía cuenta con 100 puestos de trabajo PC Windows 10 donde los usuarios tienen instaladas las aplicaciones de trabajo, navegador web, cliente de correo, cliente de ERP, herramientas ofimáticas, etc. Para la mayoría de los puestos, el horario de trabajo es de lunes a viernes, de 8:30 a 19:00.

¿Cómo podemos abordar un proyecto de teletrabajo en este entorno?

El primer paso sería el de abordar la migración del entorno ofimático a un entorno de trabajo colaborativo como Office 365. Esta transición facilitaría la movilidad de los usuarios de forma sencilla desde su puesto de trabajo de la oficina a su entorno de teletrabajo y viceversa.

El siguiente paso sería el de desplegar los entornos de escritorios, con las aplicaciones tradicionales: ERP, etc., en Windows Virtual Desktop.

La conexión del entorno de escritorios a los sistemas on premise de la empresa se realizaría a través de un VPN, extendiendo la red privada y garantizando la seguridad del acceso.

Los servidores Windows 10 se desplegarían en función de la carga de uso. Por ejemplo, en momentos de pico podríamos contar con 6 ó 7 máquinas virtuales Windows 10 para los 100 usuarios y dejar una para las horas valle. Toda la gestión de aumento y reducción de los recursos quedaría en manos del servicio.

Además los desktop virtuales podrían estar apagados fuera del horario laboral, reduciendo el coste de uso de recursos.

El acceso de los usuarios sería a través de web cifrada (HTTPS) o a través de túneles VPN, usando la tecnología de Azure.

Toda la gestión de usuarios seguiría haciéndose mediante Directorio Activo, y los perfiles de usuario y aquellos documentos compartidos que no se hayan querido llevar a OneDrive o Teams, estarán alojados en el servicio de Azure File Storage.

Quedaría la parte del equipo de acceso del cliente, aunque con una complejidad mucho más reducida. Los requerimientos hardware ya no tendrían que ser especiales, no sería necesaria la instalación de aplicaciones corporativas en estos clientes, y su gestión se reduciría a la mínima expresión. Además, sería posible el uso del equipamiento del propio usuario implementando las políticas BYOD

Windows Virtual Desktop de Azure es una herramienta que consideramos fundamental en el proceso de implementación de una estructura de teletrabajo, complementario e integrado con otra parte fundamental Office 365.

Si quieres conocer en más profundidad la solución y cualquier detalle técnico de la misma no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

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