Nuestra naturaleza humana lleva incorporada la necesidad personal de “ser escuchad@s y entendid@s en el acto”, por lo tanto, no hay nada más tranquilizador que levantar un teléfono y sentir que nuestro receptor ha captado nuestro mensaje.
Ahora bien, trasladándonos al mundo empresarial, nuestra voz y nuestra actitud en la emisión de llamadas, transmiten muchos matices como por ejemplo la calma y la seguridad que sin duda nos ayudarán a conseguir “el éxito” en cada una de nuestras comunicaciones y negociaciones.
Por esta razón, independientemente del puesto que ocupes dentro de tu organización, te recomiendo los siguientes consejos para que los tengas en cuenta en tu día a día antes de marcar el teléfono de contacto de tus clientes, posibles clientes, proveedores, incluso tus propios compañer@s:
1. Prepara previamente tu llamada, te aportará más seguridad y efectividad.
Seguramente tu interlocutor, al igual que tú, recibe a diario un sinfín de llamadas telefónicas, por lo tanto, tu llamada es una más y tratará de solventarla lo más rápido posible ya que tiene que continuar con su jornada laboral. Debemos ser direct@s y concret@s ya que por cada segundo que pase a partir de los 3 minutos de conversación, la capacidad de concentración de nuestro receptor disminuirá paulatinamente y por lo tanto pondremos en riesgo la comprensión de nuestro mensaje. ¡Define tu objetivo antes de llamar y ve al grano!
2. Utiliza la sonrisa telefónica para conectar con tu interlocutor.
La persona que tenemos al otro lado del teléfono no puede vernos, por lo tanto, nuestra voz y el tono que utilizamos es el principal elemento con el que contamos para “llevarle al huerto”. Al igual que en una conversación cara a cara, la sonrisa y mantener una actitud positiva hace que la comunicación fluya mejor. ¡Déjate invadir por el buen rollo y siente sus beneficios!
3. Practica la escucha activa y dale importancia a lo que dice la otra persona.
Hoy en día pasamos más tiempo pensando en lo que vamos a responder que en escuchar a los demás. Que nuestro receptor sienta realmente que ha sido entendid@ es la clave fundamental para que la relación sea fructífera en ambas partes. ¡No le interrumpas cuando hable y sobre todo ofrécele feedback para demostrarle que has entendido lo que te acaba de comentar!
4. Instala para siempre el “por favor” y el “gracias” en tu vida.
Estas 2 palabras mágicas nos abren muchas puertas a lo largo de toda nuestra vida. A tod@s nos encanta que nos consideren, nos pidan permiso y nos agradezcan lo que hacemos en el día a día. Cuando agradecemos estamos reconociendo el trabajo, la ayuda y la importancia de lo que la otra persona ha hecho por nosotros. ¡El respeto y la gratitud son las llaves que atraerán la abundancia a tus relaciones personales y profesionales!
Seguramente ya conocías todos estos puntos, aun así, siempre es bueno recordarlos y tenerlos en cuenta también en los nuevos entornos de comunicación corporativa que plantean las novedosas plataformas colaborativas como Office 365 de Microsoft.
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Óscar Martín
Marketing & Comunicación