No seré yo quien desprecie el valor de los datos, siendo una persona que vivo de las tecnologías de la información y comunicación, solo faltaría. Tampoco recurriré a la manida expresión de que ‘lo importante no son los datos sino la información’; de Perogrullo. Pero creo que a veces pasamos del blanco al negro, sin detenernos en los matices. Y los matices contienen, a mi entender, la verdad.
Un negocio es una actividad creada para generar beneficio, creada para generar resultados positivos; si no, no es un negocio. Pero no olvidemos que es una actividad humana, por lo que planteo una reflexión: ¿es humano basar todas las decisiones en datos? O mejor dicho, ¿puede un negocio basarse únicamente en los datos?
La respuesta es categórica: no. Los datos sirven para tomar decisiones, pero los negocios necesitan de una cualidad humana que no reside en datos: la intuición. Aún iré más lejos: los negocios requieren atrevimiento, osadía, cierta temeridad, empuje, liderazgo y cierta dosis de rebeldía.
Los datos y las informaciones son útiles pero nunca suplirán la decisión, el libre albedrío de las personas. De no haber usado todas estas características, probablemente no habríamos conocido el iPhone, ni los PC’s, ni la informática, ni la democracia…
Frases como “convertir los datos en información para que se puedan tomar decisiones” son ciertas, pero, a veces, las grandes decisiones se toman incluso en contra de los datos.
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Con un cuadro de mando adecuado y las indicaciones de un libro todos seríamos capaces de llevar al estrellato una empresa, sin embargo muchas empresa se estrellan teniendo por criterio sólo lo que les dice el ERP.
Las personas, su inteligencia y la intuición son imprescindibles.
Saludos.
Totalmente de acuerdo, Sergio. ¡Gracias por tu aportación!